High on pepa tour 2011

Ay chicos, me encantaría contar este viaje como corresponde: desde el principio, pero NO PUEDO. Mi ultimo día fue tan genial que no puedo dejarlo para el final.

Estabamos en Parana, haciendo tiempo esperando a dos chicas amorosas que nos sacaron a pasear. Ibamos a ir a Santa Fe. Con mi amiga estabamos cagados de hambre así que sacamos UNA CREMONA y nos sentamos a comerla en la calle. Ella saca una bolsita con un cartoncito. Yo, curiosa, le pregunto que es. Solo se limitó a pedirme un alicate para cortarlo a la mitad, me dijo "abri la boca y chupalo, no lo tragues". Yo hice caso. Porque una es puta, pero sumisa. Teóricamente, me iba a hacer efecto en una hora. Nada ocurrió. Llegaron las chicas, @todaboluda y @elautotepide, y nos fuimos a esperar el bondi para ir a Santa Fe capital.

Lo unico que recuerdo de esa ciudad es que terminamos en un casino sacandonos fotos con el rabino Bergman y Olmedo. Igual tengo recuerdos pero son como flashes. Momentos. Me acuerdo estar sentada en un lugar parecido a Puerto Madero, en un shopping saltando, en un monasterio... Por suerte sacamos fotos de todo y sé que estuve y no me mintieron.

Ustedes no se dan una idea todo lo que viví. Y ahora entiendo a mi amiga cuando me dijo en el bondi de vuelta que la pepa "es una droga muy solitaria". Es imposible de contar lo que una siente cuando está high on pepa. Nadie puede entenderlo. Nadie que no lo haya experimentado. Yo misma me siento una pelotuda que no entendía NADA de la vida hasta ayer.

Cuando me lo contaban, pensaba que era un estimulante, que te aceleraba y punto, pero no... te cambia la voz, te podés reir con fuerza y hablar A LA VEZ. Y no parás de reirte. Se te deforma la cara. Y si estás con alguien que también está high, es tremendo. Entre los dos se iba formando como una pelota que hacía que no pararamos de reirnos. Incoherencias totales, claro. Les cagamos el viaje a la gente en el colectivo de vuelta a parana. Todos querían dormir y nosotros no parabamos. En un momento, cagadisimos de hambre, entramos en una panchería en Parana y no podíamos caretearla ni un poco. A mi me temblaba el cuerpo y parecía Charly Garcia. Hablaba y no podía articular bien, y me reía como loca. Decía pelotudeces. Caminaba raro y no santía las piernas. Era super raro. No podía mover muy bien los dedos. Pero una era conciente. Porque no es que no sos conciente. Puta, pero conciente. Estás con cierto grado de control, pero a la vez no. Había varias familias sentadas en las mesas y nos miraban con una cara... con Agos teníamos las pupilas tan dilatadas que parecía que teníamos ojos negros.

Lo que tiene la pepa es que no la careteas ni en pedo. Es tan obvio que estas arruinadisima y del orto que tampoco te interesa caretearla. Una siente que sí la caretea, pero cuando te das cuenta que todo el mundo te mira es porque evidentemente NO. Ahora entiendo al Pity, a Charly, a Fabi. AHORA ENTIENDO TODO. Además usás palabras que parece que las tomás de un inconciente colectivo. Palabras de droga que jamás usaste en tu vida.


En estos días voy a ir relatando el viaje, pero les quiero adelantar esto, y que fue la mejor experiencia de mi vida. Este viaje fue lo mejor del mundo.

Los dejo con una foto de algo que fuimos escribiendo en el colectivo de vuelta a Buenos Aires. Yo no quería olvidarme de algunas cosas y, aún high on pepa pero ya en la recta final, fuimos escribiendo cosas: