Anita

El viernes vino mi hombre latino a dormir a casa. Fue como lindis y mágico, pero raro. No sé cómo explicarlo. Llegó a las 22 hs, yo teóricamente había ido a cenar con mis amigos (mentira, obvio) así que le dije que se venga cenado. Anteriormente fui a Coto y compré LO QUE NUNCA: cosas caras de persona semi pudiente, como budín Ser. Chicos, el budín Ser me parece un lujo TOTAL. 12 pesos por budín, por más esponjoso y dietético que sea, es una estafa, pero no importa. Pensé en comprar el Don Satur de $2,40 y sacarle el envoltorio, onda para que pase como Budin sin marca, pero es medio piedra y se iba a notar lo berreta, así que opté por la onda verde. Mientras ponía Yogurisimo en el chango, me crucé con Anita. Estuve a punto de raptarla y llevarla a casa un rato pero luego desistí. También pensé en llamar a Norma Aleandro, quien seguro la debía andar buscando, pero no tengo su teléfono.

Se hicieron las 10 de la noche, yo me había rasurado el orto como nunca. Estaba tipo lija. Incluso pensé en contorsionar mi cuerpo y exfoliar mi cara frotándola contra los cachetes del culo, pero en vez de eso me puse cremita para suavizar. Estaba listísima. El horno flameaba a full para calentar la casa, porque no les conté, pero estuve 7 meses pensando que el horno no funcionaba y en realidad tenía que girar un poquito más fuerte el botoncito… jiji, soy una pelotuda. Igual es como que si lo pongo en máximo sale fuego por un agujero y me da miedo, siento que va a explotar todo, pero el depto se calienta en 20 minutos, lo cual es genial y hace que valga la pena el peligro de muerte.

Tocan el timbre, era él. La luz del edificio estaba cortada no sé por qué. Así que bajé, abrí la puerta, y entro un hombre. Le di un beso en la boca y le pregunté “sos vos, no?”, se ríe y me dice que si. Por un momento se me cruzó por la cabeza que había hecho entrar a un cartonero y lo había besado. No se veía nada, no sé qué carajo pasaba.

En mi casa estuvo todo bien. Charlamos mucho para mi gusto. Nos reimos, me mostró un grupo que se llama Army of Lovers que tiene unos videos super bizarros que ya postearé. Estuvo bueno la verdat. Nos acostamos tipo 2 am y charlamos MUCHO más. Acerca de todo, ex novios, bla bla. Terminamos cogiendo, claro está. Y es raro lo que me pasa con él. Es muy lindo, no me calienta si lo veo pero en cuanto empezamos a chapar, ME TOCA CON SUS SENSUALES MANOS Y ME HACE RUGIR COMO UNA CABRA EN EPOCA DE LACTANCIA. Me calienta MUCHO en el momento sesual, pero no antes ni después. Un fenómeno raro en mi. Creo que este chico es el primero que es lindo lindo y me calienta. Todos los demás lindos con los que estuve no me calentaban en la cama y siempre terminé recurriendo a los peruanos de clase baja que trabajaban vendiendo ropa en Retiro para que me posean una y otra vez.

La mañana siguiente fue lo chocante.

No pasó nada, chicos. Yo, como siempre que duermo con alguien, dormí como el culo, poquísimas horas y mal. Me levanté, me colgué en la compu, encendí el horno para calentar la casa, hice el desayuno para los dos, pero hablamos poco. No nos dimos ni un beso, un abrazo, NADA. Yo a la mañana reconozco que soy un ser especial. No se me puede hablar mucho, tengo cara de culo y contesto con monosílabos. Sobre todo si dormí solo tres horas. Pero igual es como que no pasó nada. Ni en el ascensor. Nos despedimos en plaza Once tipo 8.30 am. Yo me encontraba con una amiga, él se iba a su casa a seguir durmiendo. Encima ni bien se levantó, yo puse Britni Espiars de fondo (Till the world ends), bajito, y él, risueño, me dice: “no te aturde escuchar esa música ni bien te levantás”? Les juro que logró hacerme sentir ridícula. Yo me levanto a las 6 de la mañana y pongo Aqua a todo volumen. Soy bastante villera, pero nunca nadie me lo hizo ver tan claramente.

A la tarde me mandó un mensajito diciendo que se sintió muy cómodo bla bla. Yo le respondí simpática pero seca. No sé, no tuve ganas de verlo, siempre me pasa igual. Cuando paso muchas horas con una misma persona necesito distancia de un par de días para volver a encontrarme. Es raro. Vamos a ver como sigue. Me gustaría volver a verlo, pero no siento que sea EL AMOR DE MI VIDA.

Ay, y como detalle anecdótico, no saben los pedos que me tiré ayer durante el día. Retuve TANTO el viernes a la noche que el sábado parecía una sartén llena de porotos que explotan y se hacen pochoclos. Imaginen eso pero con pedos.